Bañar a un bebé puede ser una experiencia emocionante, aunque también puede parecer un poco intimidante para padres primerizos. Lo importante es que recuerdes que el baño es una habilidad que se va aprendiendo con el tiempo y la práctica 😌 Además puede ser una oportunidad para crear un vínculo especial con tu bebé.  

A continuación te contamos algunas técnicas para que la hora del baño sea un momento seguro y placentero tanto para vos como para tu bebé. 

📋 Antes de comenzar prepará todo lo que vayas a necesitar (para tenerlo a mano). Esto incluye una toalla suave, pañales limpios, ropa fresca, una esponja suave, jabón para bebés y cualquier otro elemento que desees utilizar, por ejemplo algún juguete flotante 🐠

💦 Verificá que la temperatura del agua sea la adecuada, es decir que esté tibia pero no caliente al tacto. La temperatura recomendada es alrededor de 37°C.

🧼 Usá un jabón suave, recordá que la piel de los bebés es delicada, podés conocer más sobre este tema en nuestra nota de 5 Consejos para cuidar la piel de tu bebé. 

No te olvides de secar bien a tu bebé, prestando especial atención a las áreas donde se puede acumular la humedad, como el cuello, las axilas y los pliegues de la piel. Si es necesario, aplicá una crema hidratante suave para bebés para prevenir sequedad e irritación.

😌 Creá un ambiente relajante. Podés agregar algunos juguetes flotantes y música suave para crear un momento agradable y divertido. 

✅ Aprendé a reconocer las señales de alerta. Aunque el baño es una actividad segura y placentera, es importante estar alerta a cualquier señal de incomodidad o malestar por parte de tu bebé. Si muestra signos de irritación, enrojecimiento o resequedad en la piel, es posible que debas ajustar la temperatura del agua, el jabón o la duración del baño. 

Recordá que si tenés alguna preocupación o pregunta, no dudes en consultar con tu pediatra de confianza 🧑🏻‍⚕️

¡Hasta el próximo mes!